No cabe duda que lo acaecido a consecuencia del COVID-19 desde diciembre de 2019 en China le ha cambiado la forma de vivir a todo el mundo, y no solo en lo personal, familiar y profesional han existido cambios radicales en los cuidados que manejamos; sino que también lo ha sido para las empresas en los diversos rubros de los estados financieros.
A continuación, se hará mención de lo que consideramos más impactante para los estados financieros desde diversas perspectivas:
Inventarios (NIF C-4)- En algunas industrias se necesitaría castigar el valor del inventario a su valor neto de realización, cuando se reduce su movimiento o los precios de ciertos productos se reducen o se vuelven obsoletos por una reducción de ventas por debajo de las expectativas. Las reglas de inventarios requieren que ciertos costos fijos que son incluidos en el valor del costo del inventarió basado en una capacidad de producción normal, sean revaluados cuando la reducción de la producción puede afectar el nivel de costos fijos incluidos en el costo del inventario por capacidad no utilizada, y además de evaluar el impacto en la valuación y los ajustes que procedan al costo del producto tendrían que considerar la revelación en las notas a los estados financieros.
Cuentas por cobrar – Estimación de perdidas crediticias esperadas (PCE) (NIF C-3)– Es indiscutible que se presentaran problemas con la cobranza, esto debido a que si las empresas se encontraban sin operación esto tendrá como resultados que no contaran con los flujos necesarios para hacer frente a sus obligaciones (por compra de mercancía o por servicios recibidos), es por ello que la entidad debe reconocer, en caso de proceder, una estimación por concepto de perdidas crediticias esperadas de las mismas, afectando los resultados del periodo en el que se reconoce la cuenta por cobrar.
Para determinar la estimación para PCE, la administración de la entidad debe efectuar, utilizando su juicio profesional, una evaluación de las perdidas esperadas por deterioro de las cuentas por cobrar, considerando la experiencia histórica de perdidas crediticias, las condiciones actuales y pronósticos razonables y sustentables de los diferentes eventos futuros cuantiadles que pudieran afectar el importe de los flujos de efectivo futuros por recuperar de las cuentas por cobrar.
Propiedad, planta y equipo (NIF C-6)– El activo fijo como lo conocemos en los estados financieros actualmente está siendo subutilizado o no ésta siendo utilizado por un periodo de tiempo (en caso de no ser una empresa considerada como esencial como lo establecieron las autoridades), o las inversiones en proyectos de capital se encuentran suspendidos, las NIF aplicables en México requieren que se sigan depreciando cuando un activo esta temporalmente no utilizado (cuando se utiliza el método de depreciación de línea recta), en el caso de activos en proceso de capitalización de intereses se suspende cuando los proyectos están suspendidos, o en el caso de utilizar un método de depreciación en función a la actividad, el cargo por depreciación debe ser nulo cuando no haya actividad temporal de producción.
Efectos de instrumentos financieros (NIF C-2)- Se deberá efectuar una revaluación de valorización de dichos instrumentos financieros (commodities, certificados de depósito, inversiones en instrumentos de deudas) a su valor justo de mercado considerando los métodos de valuación, en el caso de arrendamiento evaluar las consideraciones que hagan ambas partes en los montos de rentas y las consideraciones de las obligaciones de hacer o no hacer de acuerdo a los contratos y las excepciones que pudieran acordar ambas partes, esto tendría consideración en las transacciones así como en las revelaciones derivadas de dichos contratos.
Obligaciones no financieras, Provisiones, Contingencias y Compromisos (NIF C-9)- Existen diversos cambios que pudieran derivarse por las obligaciones o provisiones contraídas y que pudieran modificarse por las circunstancias, provisiones o contingencias que pudieran derivarse por la situación particular de los efectos del COVID-19, reestructuras, pasivos adicionales o cambio en obligaciones contractuales de hacer o no hacer y los efectos que pudieran implicar, beneficios a empleados no considerados y derivados por los efectos del COVID-19, obligaciones adicionales por efectos de impuestos tanto corrientes como diferidos por las circunstancias fiscales que pudieran presentarse por los efectos del COVID-19.
Se puede llegar a tener un incumplimiento a obligaciones de hacer o no hacer establecidas en contratos celebrados con anterioridad a los efectos del COVID-19.
Reconocimiento de ingresos (NIF D-1)- Tanto en ingresos como en ventas, puede reducirse derivado de la caída de la actividad económica a consecuencia de las actividades para reducir la propagación del virus, esto en adición de las estimación que hubiera hecho la administración al medir los ingresos derivados de venta de bienes o servicios, que ya fueron distribuidos y recibidos por sus clientes y que pudieran tener un impacto por la caída de la actividad, es decir la disminución de la demanda pudiera implicar un incremento en las devoluciones sobre ventas o dependiendo del tipo de producto y la disminución material de la actividad comercial por X número de meses de 2020, pudiera implicar un producto fuera de temporada, de año y/o modelo que no sería realizable en 2020. Sera necesario revaluar los contratos de venta y los efectos que en estos la situación actual pudiera afectar las ventas o ingresos por bienes o servicios.
Negocio en Marcha (NIF A-2)- La administración debe considerar las implicaciones potenciales del COVID19 y las medidas que ha tomado para su control, para evaluar la habilidad y capacidad de la entidad para continuar como negocio en marcha, la compañía no continua bajo el principio de negocio en marcha si la administración de la entidad intenta o considera la liquidación de la entidad o cesar su operación, o no tiene alternativas realistas que indiquen que continuara operando. La entidad debe considerar y evaluar las medidas tomadas por el Gobierno e instituciones financieras locales en la evaluación de su negocio en marcha, y debe considerar que los eventos posteriores a la fecha del reporte pudieran indicar que la entidad no está bajo negocio en marcha y pudieran implicar eventos a ajustar la información reportada.
Las situaciones especiales antes mencionadas pueden ir cambiando, evolucionando o modificándose derivado de los efectos que se desprendan del comportamiento y los efectos del COVID-19 durante el resto del ejercicio 2020, tanto desde la perspectiva de la administración de las entidades como de los que emitirán su opinión sobre los estados financieros de una entidad.
Conclusión final
Recomendamos acercarse con sus asesores financieros para que en conjunto evalúen los reconocimientos contables necesarios a efectuar a cada rubro en los estados financieros derivado de la emergencia sanitaria como consecuencia de la pandemia por el COVID-19.
En Kim Gómez Franco y Mucenic estamos listos para apoyarlos.